Hacer mermelada es realmente fácil. Durante mucho tiempo compré mermeladas comerciales, primero las normales, después las etiquetadas "sin azúcar" o "bajas en azúcar". Recién comencé a experimentar en una versión casera con miel.
Ingredientes:
- 1/2 kilo de su fruta predilecta: manzana, duraznos, fresas, pera.
- Jugo de 1 limón.
- 2 a 3 cucharadas de miel.
- 2 láminas de grenetina natural.
Preparación:
- Lavar y pelar la fruta.
- Retirar los centros o las semillas.
- Picar finamente.
- Colocar en un olla a fuego lento para cocer la fruta por unos diez minutos. De acuerdo con el tipo de fruta algunas necesitarán un poco de agua y otras no, depende de la consistencia, pero no se debe agregar mucha para no hacerla muy líquida.
- Agregar el jugo de un limón y la miel. Cocinar por otros cinco minutos.
- Remojar las láminas de grenetina en un recipiente con agua, cuando estén suaves, retirarlas y agregarlas a la olla con la fruta. La grenetina cumple la función del azúcar para espesar y dar la consistencia pejagosa.
- Probar y rectificar la sazón. Si les parece que no está lo suficientemente dulce, pueden agregar otra cucharada de miel o un poco de azúcar.
- Dejar cocinar por otros minutos hasta que reduzca y tome la consistencia de mermelada.
- Vaciar en un frasco esterilizado, dejar enfriar y tapar.
Quedan realmente ricas.
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